Testimonios
Aquí la experiencia de una mujer disfrutando de mis servicios.
Visitantes felices
Tammy
Llegué al retiro de Doris en Costa Rica sintiéndome destrozada y abrumada. A mis 60 años, atravesando un divorcio y luchando contra el estrés, necesitaba desesperadamente un cambio. No sabía que mi estadía de cuatro semanas en febrero realmente cambiaría mi vida.
Desde el momento en que pisé el exuberante jardín, sentí una sensación de paz que me invadió. El retiro me brindó la combinación perfecta de apoyo y actividades fortalecedoras. Las sesiones diarias de yoga y meditación ayudaron a calmar mis nervios, mientras que las caminatas vigorizantes por la naturaleza reavivaron mi entusiasmo por la vida.
Los cambios más notables se produjeron en mi cuerpo. Mi sistema nervioso, que había estado en constante modo de lucha o huida, finalmente encontró el equilibrio. Mi frecuencia cardíaca en reposo descendió a niveles que nunca había visto antes y pude dejar de tomar mis medicamentos para la ansiedad (Restoril, lorazepam y Wellbutrin) bajo la supervisión médica adecuada. Incluso mi presión arterial se normalizó, lo que me permitió reducir la dosis de mi medicación.
Celebrar mi 60.° cumpleaños rodeada de la hermandad de Doris que me apoyaba fue la guinda del pastel. Me fui de Costa Rica cuatro semanas después sintiéndome renacida, física, mental y emocionalmente. Este retiro no solo mejoró mis signos vitales, sino que revitalizó todo mi ser. Estoy eternamente agradecida por esta experiencia transformadora que me puso en el camino de la salud y la felicidad holísticas.